La tecnología y los cerebros inquietos hacen que un juego tan simple como entretenido como el ping-pong, se transforme en una obsesión por mejorar tanto para aficionados como para profesionales. El diseñador Thomas Mayer, como tesis de su licenciatura, transformó una simple mesa de ping-pong en un centro de entrenamiento de alta tecnología.
El sistema de la «Table Tennis Trainer» consiste en una serie de dos cámaras de movimiento “motion-tracking” de PlayStation Eye y un proyector encima de la mesa. El resultado es una proyección en vivo sobre la tabla que presenta una gran cantidad de información para los jugadores, incluyendo marcadores, programas de entrenamiento y resultados. Las características más interesantes, son los módulos de formación que proporcionan precisión al jugador.
Una versión para el gran público está en marcha, y muchas oficinas del mundo estarán agradecidas por el incremento de la productividad de sus empleados.
// ··· //